Tomate (91,5%), aceite de oliva (4,8%), azúcar, espesante: almidón modificado de maíz y sal.
18.50€ IVA incluido
Elaborado en Murcia con las mejores materias primas locales y nacionales. El tomate frito Nicola es sin duda nuestra conserva estrella. Una receta familiar de las de toda la vida y un homenaje a nuestros sentidos. Además está libre de conservantes, no tiene gluten y es apta para veganos. ¿Quieres saber algo? Todos querrán repetir…
Tomate (91,5%), aceite de oliva (4,8%), azúcar, espesante: almidón modificado de maíz y sal.
Peso | 6 kg |
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Dimensiones | 8 × 8 × 12 cm |
Elaborado en Murcia con las mejores materias primas locales y nacionales. Una receta familiar de las de toda la vida y un homenaje a nuestros sentidos. Sin conservantes, gluten free y apto para veganos.
La estrella de nuestras conservas y de nuestra gastronomía. Si lo piensas bien, cualquier guiso lleva una base de tomate sofrito. ¿Por qué no usar uno ya preparado? Ahorras tiempo, evitas que te sobren tomates y consumirlos antes de que estén en mal estado y recuerda que cuando el tomate está cocinado, mejora sus propiedades.
¿Te has preguntado alguna vez de dónde viene la salsa de tomate? Empecemos por el origen del tomate. Fue Hernán Cortés el que trajo el tomate a España y en el siglo XVII se comenzó a utilizar como alimento. Aunque la planta provenía de América, la riquísima salsa de tomate casera que tanto nos encanta, nace en nuestro país. Y es evidente que ha ido evolucionando con el paso de los años hasta lo que hoy consumimos.
Es una de las salsas con más éxito del mundo gastronómico. Se puede usar como ingrediente o como acompañamiento para diferentes platos. Pastas, carnes, guisos, pescados, huevos, mariscos, albóndigas, etc. A cualquier receta le va bien un buen tomate frito. Con nuestras conservas Nicola la calidad de tu comida está asegurada.
Hacer conserva de tomate frito en casa es una buena opción para sobrevivir unos cuantos meses y mejorar la calidad de la comida, siempre y cuando el tomate esté de temporada. Es cuando mejor calidad y precio tiene la pieza. Por eso, las conservas de tomate frito Nicola te van a salvar la vida en más de una ocasión. Almacenarlas en la despensa de casa no cuesta nada y lograrás que tus comidas y salsas tengan un sabor más potente y auténtico durante todo el año.
Hacer tomate frito en conserva puede parecer una receta muy sencilla y es cierto. Lleva pocos ingredientes y la preparación es muy fácil. La dificultad y el truco donde reside la calidad del resultado está en la elaboración, los tiempos, el control de la temperatura y el toque secreto del corte. Nuestra receta es tradicional, por lo que la sencillez está asegurada. Lo que hace premium a nuestro tomate frito es la calidad del tomate y nuestra forma de elaborarlo.
¿Quieres saber cómo hacer tomate frito en conserva? Te lo contamos. Aunque estamos acostumbrados a ver tomates todo el año, es una fruta de temporada. Concretamente su mejor época son los meses entre julio y septiembre. Es cuando mejor calidad tienen y cuando los puedes comprar a muy buen precio. Aprovecha este tiempo para comprar buenas cantidades de tomate si lo que quieres es preparar tu tomate frito en conserva. Pero si no dispones de tiempo para preparar tu tomate frito en conserva, nuestros envases de conserva son la mejor opción. Su sabor te sorprenderá por lo casero y tradicional.
El tomate es el ingrediente principal. Llega a nuestras cocinas recién recolectado de los mejores campos de Murcia. Su frescura es lo que le dará el máximo sabor a nuestro tomate frito. Aceite, sal, cariño y dedicación son el resto de ingredientes que utilizamos en nuestra elaboración de esta conserva que tanto nos gusta.
Para la elaboración del tomate frito lo primero que realizamos es el lavado de todos los tomates y pelarlos para que la piel no arruine la textura que queremos conseguir. El corte es la parte más importante de este proceso. Parte de la calidad de nuestras conservas viene de ahí, de la preparación y del corte fino que realizamos en Conservas Nicola. Y ya es momento de poner en nuestras cacerolas un poco de aceite y echar todos los trozos de tomate.
Añadimos la cantidad necesaria de sal y cocinamos a fuego lento, removiendo de vez en cuando para asegurar que no se quemará y que el resultado tenga su mejor sabor y todas las propiedades que tiene el tomate frito en conserva. Es importante corregir de sal y la acidez. Cuando está espeso y ha reducido una gran cantidad de agua, la propia elaboración nos dice que es el momento de apartarlo del fuego.
Para obtener una buena textura del tomate frito y tener un sabor excelente en tus recetas, trituramos bien toda la producción que hemos realizado. Realizamos esta acción varias veces hasta alcanzar nuestro objetivo. Después utilizamos una tecnología de envasado innovadora para que nuestros envases queden cerrados herméticamente y su contenido dure a lo largo del tiempo sin necesidad de refrigeración y conservantes.
En Conservas Nicola sabemos que nuestra receta de tomate frito casero es buena y por eso vamos a compartir contigo algunos de sus secretos. Para empezar, nos abastecemos de ingredientes de calidad con tomates de temporada. Son los que mejor sabor tienen. Aromatizar la salsa y dedicarle tiempo. Los cocinados a fuego lento requieren de dedicación y mimo para obtener un resultado exquisito y delicioso sabor.
Preparar tomate frito en conserva no se hace en un momento. Lavar y pelar los tomates lleva su tiempo porque hablamos de grandes cantidades. Cortarlos y después el cocinado a fuego lento, lo normal es que te lleve unas dos o tres horas. Por eso te recomendamos nuestro tomate frito en conserva.
100 gramos de tomate frito contiene 86 kcal.
Si se te queda abierto algún envase de tomate frito en conserva, y no lo vas a consumir en un periodo de tiempo cercano, sí lo puedes congelar. Pero ojo, es muy importante que lo congeles en un recipiente de plástico o vidrio, ya que si lo congelas en la propia lata la oxidación por el exceso de frío te podría ocasionar problemas de salud.
Teniendo en cuenta que los envases se cierran herméticamente para su larga conservación, el tomate frito en conserva puede durar abierto en el frigorífico dos o tres días. En el caso de las latas, si quieres que su contenido se conserve mejor, es preferirle cambiarlo de envase una vez abierto para evitar la oxidación, a un bote de vidrio o de plástico.
El tomate frito no tiene otros ingredientes que no sean tomate, aceite y sal. Corregimos la acidez con corrector de acidez habitual y nada más. No contiene conservantes y es apto para veganos.
El tomate contiene una gran cantidad de antioxidantes y propiedades que al cocinarlo evita que se pierdan y provoca que se combinen mejor con los probióticos de nuestro sistema digestivo. De tal forma que se convierte en un alimento beneficioso.
La principal diferencia es la consistencia. La salsa de tomate suele ser más líquida y el tomate frito más espeso porque en su elaboración conseguimos que se reduzca casi en su totalidad el agua que contiene.
Para lograr un cierre hermético y que su contenido se conserve en buen estado lo ideal es hacer un baño maría de entre 10 y 15 minutos. A esto hay que sumarle otros 10 minutos para que se enfríe un poco el agua y los botes para poder manipularlos.
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